5/23/2010


P a z

Voy de paso por este mundo fugaz
No pretendo parar ¿Dime quién camina Cuando se puede volar?


No intentes amarrarme, ni dominarme
Yo soy quien elige como equivocarme

3/28/2010


Your voice was the soundtrack of my summer

3/15/2010

Vuela alto mientras puedas

Es increíble como pasa el tiempo. Vivo diciéndolo.
Cada vez siento más el paso del tiempo; soy de quedarme pensando y revivir recuerdos viejos que me reconforten o alegren el día, y es ahí cuando me doy de cuenta del paso del tiempo.
Es increíble como pueden sucederte todo tipo de cosas en tan solo tres años (mi caso), me enamore por primera vez, dolió, porque no era un amor correspondido pero aún así lo recuerdo como un sentimiento hermoso, conocí a mis verdaderas amigas, conocí a gente que vale la pena querer y valorar, como también abrí los ojos con otras que no valían la pena (me es feo decirlo así pero sinceramente no se como más “explicarlo”). Aprendí a abrirme, a defenderme, a no retener toda esa angustia que me destruía por dentro. Gracias a la gente que me presto su oído- más allá de mi psicóloga- hubo gente que estuvo presente siempre cuando lo necesite, con una mirada o un abrazo, y creo que no tienen ni idea de cuanto valía eso para mi.
Gracias a que aprendí y descubrí nuevas cosas- aunque me faltan muchas otras- puedo vivir mi vida cotidiana desde otra perspectiva, con más paciencia, y tratando de no ser negativa, debo admitir que me cuesta a veces porque esta claro que en la vida no todo es color de rosa, pero con optimismo y buena onda se aliviana todo, siendo frescos y empezando el día con una sonrisa- por más que cueste horrores-.
Así que me voy a dedicar a volar alto mientras pueda, a disfrutar de las cosas sencillas, y a vivir la vida. Se los recomiendo.

1/19/2010

La Siesta

Dejé el romanticismo de lado para contar mi pequeña odisea (?) a la hora de la siesta. Después de almorzar como cualquier humano me pintaron esas ganas incontrolables de dormir la siestita, vi el soleado clima en mi jardín y decidí tirarme en una de las sillas de madera con un libro (Alejandro Magno). Todo hermoso, tranquilo, los pajaritos cantando y yo descansando como ninguna. Hasta que al parecer los pajaritos tuvieron una revuelta en el techo y empezaron a aletear y pitar como desquiciados mentales con plumas; suspiré y me dije: son solo pajaritos. Pero, después, al sonido insoportable de estos animalitos con alas se le sumaron los gritos de la vieja de al lado, quien al grito de “JUAANCITO” perseguía a su pobre nieto por toda la casa. La mujer de la prominente voz siguió gritando y llorando, a todo esto se le sumo el llanto de sus nietos que además gritaban cada dos segundos; suspiré y me dije: Ya se van a callar (Pero ¡no!). Con Magno es mis manos y los gatitos de mi abuela jugando a meter las patitas entre los espacios de la silla de madera para tratar de agarrarme con esas filosas uñitas que tienen decidí finalmente meterme en mi cama, así lo hice creyendo que por fin iba a tener mi preciado momento de paz, pero cuando yo ya estaba acostada agradeciendo lo acolchado que estaba mi colchón y cayendo en un sueño profundo, el sonido de la música infantil del teléfono resonó en toda la casa despertándome, esperé a que alguien lo atendiera pero nadie lo hizo, así que rendida me levante y lo atendí, era “el pibe del lavarropas”, insulté para mis adentros al pobre flaco. Y ahora estoy acá sentada, frente a la computadora escribiendo todo esto, con los ladridos de la bestialidad de perro de al lado y los agudos de un caniche respondiéndole, con un vaso de jugo y unas ganas terribles de dormir, pero yo sé que muy pronto van a tocar el timbre y mi preciada siesta se va a arruinar, otra vez.

1/18/2010

Mi táctica es mirarte, aprender como sos, quererte como sos. Mi táctica es hablarte y escucharte, construir con palabras un puente indestructible. Mi táctica es quedarme en tu recuerdo, no sé cómo ni sé con qué pretexto, pero quedarme en vos[...]
Mi estrategia es en cambio más profunda y más simple. Mi estrategia es que un día cualquiera no sé cómo ni sé con qué pretexto por fin me necesites.


Táctica & Estrategia - M. Benedetti.